Magallanes: De la Patagonia al Liderazgo Global en Hidrógeno Verde
En el extremo austral de Chile, la región de Magallanes, tradicionalmente ligada al gas natural y la exploración antártica, está escribiendo un nuevo capítulo en su historia. TotalEnergies ha presentado el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para su ambicioso proyecto H2 Magallanes, una inversión de 16 mil millones de dólares destinada a producir hidrógeno y amoníaco verde para la exportación, impulsada por una impresionante potencia eólica instalada de 5.000 MW. ¿Podría este proyecto catapultar a Chile al frente de la revolución energética mundial?
“Este ingreso marca un cambio productivo histórico que probablemente determinará el futuro de la región en el siglo XXI”, afirma el gobernador regional, Jorge Flies. Sus palabras reflejan la magnitud del impacto potencial. “Magallanes actualmente representa el 1% del PIB nacional, pero esta cifra podría aumentar al 10% en 10 años si se materializan solo cuatro de los proyectos actualmente en carpeta”, añade, vislumbrando un futuro económico brillante para la región.
Desde 2020, el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) ha recibido 17 proyectos de hidrógeno verde, concentrados principalmente en Magallanes y Antofagasta. El Panel de Datos sobre la cadena de valor del hidrógeno verde, recientemente lanzado por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), revela que estas iniciativas suman más de US$27 mil millones en inversión. Estas cifras consolidan a Chile como un contendiente clave en el mercado global del amoníaco verde, con proyecciones que alcanzan los US$700 mil millones para 2040.
¿Qué hace a Magallanes tan atractiva para la producción de hidrógeno verde? La respuesta reside en sus inigualables recursos naturales: vientos patagónicos potentes y constantes, abundancia de agua para la electrólisis y vastas extensiones de terreno ideales para parques eólicos. Tal como lo destaca el plan de “Política Energética Magallanes y Antártica Chilena 2050” del Ministerio de Energía, la región está liderando una transformación productiva, institucional y social impulsada por el hidrógeno verde, según María José Navajas, directora de Corfo Magallanes.
Hidrógeno Verde: Clave para la Descarbonización Global
El hidrógeno verde y su derivado, el amoníaco verde, son cruciales para descarbonizar industrias de difícil electrificación, como la siderurgia, el transporte marítimo y la aviación. Eduardo Bitran, economista y director de Innovación y Emprendimiento Tecnológico de la Universidad Adolfo Ibáñez, explica que, a diferencia del hidrógeno producido con gas natural, el hidrógeno verde no emite CO₂ en su uso. Bitran proyecta un mercado mundial de US$700.000 millones en 2040, impulsado por la sustitución del amoníaco gris.
Más allá del potencial exportador, Bitran enfatiza la importancia del desarrollo local: “La industria no puede estructurarse como enclave. Debe tener una relación virtuosa con el desarrollo sostenible regional. Magallanes tiene una de las mejores condiciones del mundo para producir hidrógeno verde: viento constante, agua cercana y vastos terrenos disponibles”.
Gobernanza Colaborativa para una Nueva Economía
Desde 2021, Corfo y el Gobierno Regional han impulsado el programa Transforma H₂V Magallanes, que une a empresas, la academia, servicios públicos y comunidades en torno a cinco pilares: gobernanza, desarrollo productivo, capital humano, innovación e infraestructura habilitante.
“Ya no somos solo receptores de proyectos. Estamos codiseñando la industria desde el territorio”, explica la directora de Corfo Magallanes. Bajo su liderazgo, se han capacitado a más de 149 profesionales en programas técnicos, se ha lanzado el primer Centro Tecnológico de Hidrógeno Verde del país (con más de $13.000 millones en financiamiento) y se han realizado ferias ciudadanas y cursos en soldadura, inglés técnico y logística para el H₂V.
Navajas destaca la articulación público-privada y con la academia como un factor clave: “Hoy tenemos mesas de infraestructura que priorizan proyectos estratégicos como el muelle Mardones o la Ruta 9 para carga sobredimensionada. Magallanes se está preparando para producir, transportar y exportar”.
Bitran subraya la necesidad de evitar la duplicación de infraestructura y acelerar la habilitación de bienes públicos: “Compartir puertos de importación y exportación, reducir la incertidumbre regulatoria y definir un ordenamiento territorial claro es fundamental. Esto no solo reduce costos, también minimiza impactos socioambientales”.
Corfo ha abierto un proceso RFI (Request for Information) para identificar proveedores nacionales de tecnología eólica y componentes clave. El nuevo Centro Tecnológico actuará como un nodo de innovación y certificación, generando capacidades locales y transferencia tecnológica con actores como ENAP, HIF, EDF y universidades chilenas y europeas.
Participación Ciudadana y Legitimidad Territorial
La presentación del proyecto de TotalEnergies al SEIA subraya la importancia de fortalecer los procesos de participación ciudadana y validación territorial. Bitran advierte sobre la necesidad de evitar conflictos socioambientales mediante una estrategia de ordenamiento y diálogo anticipado: “El Estudio de Impacto Ambiental debe estructurarse no solo desde la ingeniería, sino también desde la legitimidad”.
El gobernador Flies coincide: “Hemos aprendido de otros sectores. Este proceso debe asegurar calidad de vida para los habitantes de Magallanes, con empleos formales, educación técnica adecuada y una planificación que no sacrifique el entorno”.
El Gobierno Regional destaca la realización de dos versiones de la Feria Ciudadana de H₂V, con más de 2.300 asistentes, así como el lanzamiento de programas de formación en soldadura, inglés técnico, redes asociativas y emprendimiento verde.
Flies enfatiza que “La instalación de esta industria no puede repetirse bajo lógicas de enclave. Debe articularse con el desarrollo sostenible de las comunidades”.
En un contexto internacional competitivo, con países como Australia, Marruecos y Brasil, Bitran insta a Chile a avanzar rápidamente, pero con estrategia: “Tenemos ventajas naturales inmejorables. Pero si no resolvemos las fallas de coordinación, podemos quedar fuera del mercado”.
“El Estado debe priorizar iniciativas con alto potencial y bajo impacto. La ventana para consolidarnos como líder mundial del H₂V es de esta década. No hay tiempo que perder”, concluye el académico.
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