¡Crisis en la Cámara! Vicepresidentes se aferran al cargo y desafían a la oposición
La Cámara de Diputados está al rojo vivo. Gaspar Rivas (ind.) y Eric Aedo (DC), vicepresidentes de la corporación, han declarado que no renunciarán a sus puestos, generando una fuerte controversia y tensionando aún más el panorama político.
“No vamos a renunciar, nos vamos a mantener en la testera”, sentenció Rivas, dejando claro que la única forma de removerlos sería a través de una censura. Esta firme postura desafía el acuerdo previo con el oficialismo, argumentando que la derrota de la candidata del Frente Amplio a la presidencia de la Cámara los “libera” de dicho pacto.
La movida de la centroizquierda busca mantener su influencia en la mesa directiva, incluso después del triunfo de José Miguel Castro (RN) en la elección por sorteo tras un empate con Camila Rojas (FA). Esta situación pone a la oposición en una encrucijada, ya que la censura afectaría también a su propio presidente, Castro.
Desde la derecha, la respuesta ha sido contundente. Insisten en que Rivas y Aedo deben cumplir su palabra y renunciar. “Es de caballero honrar la palabra cuando se ha comprometido ante la corporación”, declaró Henry Leal, jefe de la bancada de la UDI.
La UDI incluso prepara una carta firmada por todos los jefes de bancada de la oposición, exigiendo la renuncia de los vicepresidentes. Sin embargo, en el oficialismo, la postura es de respaldo. Héctor Ulloa (ind. -PPD), jefe de la bancada del PPD, aseguró que no han solicitado ninguna renuncia y que seguirán coordinándose para mantener las vicepresidencias en su sector.
Juan Santana, jefe de la bancada del PS, priorizó la agenda legislativa del gobierno, señalando que lo importante es avanzar en los compromisos programáticos.
¿Se avecina una crisis institucional? La decisión de Rivas y Aedo de aferrarse a sus cargos ha desatado una tormenta política que podría tener consecuencias impredecibles en el Congreso. La ciudadanía observa atenta este nuevo capítulo de la política nacional. ¿Primará el acuerdo o la ambición? La respuesta está en manos de los protagonistas de esta historia.
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