China impone aranceles del 84% a productos de EE.UU

¡La guerra comercial se intensifica! China responde con fuerza a nuevos aranceles de EE.UU.

La tensión entre las dos superpotencias económicas continúa escalando. China ha respondido con contundencia a las últimas medidas arancelarias impuestas por Estados Unidos, elevando los gravámenes a productos estadounidenses hasta un 84% desde un previo 34%. Esta acción, que entró en vigor hoy, es una clara señal de que Pekín no está dispuesta a ceder ante la presión.

Este aumento arancelario es la réplica china al incremento del 5% anunciado por la administración de Donald Trump, llevando el total de aranceles sobre productos chinos que ingresan a EE.UU. a un impactante 125%. La escalada, que parece no tener fin, plantea serias interrogantes sobre el futuro del comercio global.

La respuesta de China no se limitó a los aranceles. El gigante asiático también anunció la inclusión de 12 empresas estadounidenses en su lista de control de exportaciones, afectando a sectores clave como la aeronáutica, la maquinaria y la tecnología de radares. Además, seis compañías, incluyendo proveedores de equipos militares, fueron añadidas a la lista de entidades no confiables. Estas medidas buscan restringir el intercambio de bienes de “doble uso,” tanto civil como militar.

Pekín ha reiterado su postura inflexible: “Lucharemos hasta el final.” El gobierno chino insiste en que posee la voluntad y los recursos necesarios para responder con determinación si Estados Unidos persiste en intensificar las restricciones económicas y comerciales.

Según el Ministerio de Finanzas chino, las acciones de Trump “vulneran gravemente los derechos e intereses legítimos de China” y “perjudican el sistema multilateral de comercio basado en normas”.

China defiende su postura como una medida necesaria para proteger sus intereses y la equidad global, argumentando que Estados Unidos está utilizando los aranceles como “un arma de presión máxima para obtener beneficios unilaterales.” El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Lin Jian, declaró que “Las prácticas de coerción de EE.UU. son impopulares y están condenadas al fracaso.”

A pesar de la escalada, China insiste en que no desea una guerra comercial, pero tampoco la teme. El país se muestra dispuesto a resistir hasta el final si Estados Unidos continúa por el camino de los aranceles, pero también abierto al diálogo basado en el respeto, la igualdad y el beneficio mutuo. La incertidumbre económica global se cierne sobre el mundo mientras las dos potencias se enfrentan en este pulso comercial. La pregunta clave es: ¿cuánto más escalará esta guerra y cuáles serán las consecuencias a largo plazo?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *